miércoles, 21 de octubre de 2020

Apocalipsis 20 - El reino de mil años



El gran trono blanco

Apocalipsis 20 - El reino de mil años

por José Daniel Quesada


Introducción

Después de que la bestia y el falso profeta, son lanzados vivos al lago de fuego; Satanás será atado por mil años. Entonces, dará inicio el glorioso reinado de Jesucristo sobre la tierra, lo que se conoce como el milenio. Las características de este periodo, según el comentario de la Biblia de Estudio Siglo XXI, son las siguientes:
  1. Satanás es atado y arrojado al "abismo" por mil años.
  2. Los santos anteriormente glorificados reinarán juntamente con Cristo.
  3. Se produce la monumental inversión de la maldición del pecado en la tierra.
Los propósitos de esta era del reino pueden sintetizarse como sigue:*
  1. Cumplir las profecías del Antiguo y Nuevo Testamento que profetizan dicha era.
  2. Manifestar las bendiciones de Dios cuando se cumplen las condiciones de su designio divino.
  3. Demostrar que aún bajo condiciones utópicas, con el propio Satanás encadenado, los hombres que nacen durante el milenio demuestran la pecaminosidad innata del corazón humano, ya que al concluir la era se rebelan contra un Dios bueno y misericordioso.
El capítulo veinte de Apocalipsis, se divide en tres secciones: El reino de mil años (milenio), la derrota final de Satanás y el juicio ante el gran trono blanco.

*Comentario tomado de la Biblia de Estudio Siglo XXI


Posturas sobre el milenio

Antes de entrar a analizar el relato de Apocalipsis, sobre el milenio, tengo que manifestarles mi pensamiento sobre éste. Los científicos hablan mucho sobre la edad de nuestro planeta; dicen que la tierra tiene millones de millones de años. Sin embargo, eso no es lo que enseña la Biblia; puede ver mi estudio sobre el diluvio, donde toco este y otros temas. De acuerdo con el relato bíblico, nuestro planeta debe estar por cumplir 6000 años. Y con el milenio, se completaría la semana milenial, 7 mil años, número de la perfección.  También debo aclarar que existen tres posiciones de interpretación sobre este tema. Los cuales voy a mencionar, pero no me voy a detener a revisarlos profundamente. Las tres posiciones son: Amilenialistas, Postmilenialistas y Premilenialistas.

Amilenialistas

A grandes rasgos, los que tienen esta posición, piensan que el milenio representa de manera simbólica, nuestra era actual. No creen en la literalidad de los mil años, sino que se trata de un periodo de tiempo indefinido. Creen que esta era inició con la ascensión de Cristo, y que culminará en su segunda venida corporal a la tierra. Su pensamiento es que, Satanás fue atado en la primera venida de Cristo y que sigue así. Dicen que los creyentes ya están gobernando con Cristo desde el cielo. Piensan que las promesas hechas a Israel, concernientes al reinado terrenal del Mesías, se cumplen en la Iglesia.

Postmilenialistas

Esta otra posición sostiene que el reino milenial en la tierra tendrá lugar antes de la segunda venida de Cristo. Que de hecho, será la Iglesia la que traerá el milenio por medio de la evangelización. Pensar que la Iglesia pueda producir "un mundo perfecto" para entregárselo a Cristo, es una visión demasiado optimista, y que no corresponde con la realidad que estamos viviendo.

Premilenialistas

Esta posición sostiene que Cristo volverá antes del milenio, y que será Él mismo quien establecerá su reino en la tierra. Creen que el milenio es un reinado literal de Cristo, por mil años sobre esta tierra. Los creyentes muertos, serán resucitados para reinar con Él. También creen que las promesas dadas a Israel, sobre un reino mesiánico en esta tierra, se cumplirá con este periodo, y no hay razón para espiritualizarlas. Niegan que la Iglesia haya ya cumplido con esto en la época actual. Niegan que Satanás esté atado en la actualidad, ya que la Biblia enseña lo contrario. Durante el milenio, Cristo va a reinar en esta tierra, y los de su pueblo se sentarán sobre tronos para reinar con Él. Según esta posición, el milenio apunta hacia el futuro y no al presente.
 
Esta última posición, es la que más se ajusta a las enseñanzas bíblicas y es mi posición personal y la que vamos a utilizar para este estudio.

¿Cómo será el reino milenial de Cristo?

Juan en Apocalipsis no nos da mucha referencia sobre ¿Cómo será el milenio? pero los profetas del Antiguo Testamento, sí lo hacen.

Será un periodo de paz y justicia

El profeta Isaías nos relata que durante este periodo, reinará la paz y las naciones ya no se prepararán más para la guerra:
"Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra." Isaías 2:4
La enemistad del hombre cesará y los pueblos vivirán en paz y justicia, bajo el reinado del Mesías, el Señor Jesucristo.

Será quitada la maldición de la tierra

También nos relata Isaías que la maldición sobre la creación se revertirá, la ferocidad de los animales salvajes cesará y un niño podrá estar con ellos.
"Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará; el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará." Isaías 11:6
"La vaca y la osa pacerán, sus crías se echarán juntas; y el león como el buey comerá paja. Y el niño de pecho jugará sobre la cueva del áspid, y el recién destetado extenderá su mano sobre la caverna de la víbora. No harán mal ni dañarán en todo mi santo monte; porque la tierra será llena del conocimiento de Jehová, como las aguas cubren el mar." Isaías 11:7-9


Nuevamente habrá longevidad

Isaías también nos relata que nuevamente se establecerá la longevidad, pues un niño llegará a tener cien años. Pero si un pecador no se arrepiente antes de esa edad, será maldito.
"No habrá más allí niño que muera de pocos días, ni viejo que sus días no cumpla; porque el niño morirá de cien años, y el pecador de cien años será maldito." Isaías 65:20


Jesucristo será soberano

El profeta Zacarías también nos habla sobre el milenio, él nos relata lo siguiente:
"Acontecerá también en aquel día, que saldrán de Jerusalén aguas vivas, la mitad de ellas hacia el mar oriental, y la otra mitad hacia el mar occidental, en verano y en invierno. Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, y uno su nombre." Zacarías 14:8-9

Zacarías habla sobre que Jehová será rey sobre toda la tierra, recordemos que Jehová es el nombre con el cual los israelitas se referían a Dios. Sin embargo, se trata del Señor Jesucristo el que reinará, recordemos que en el Antiguo Testamento, no se habla de Jesús, pero Él es Ángel de Jehová que se menciona en esa parte de la Biblia. Para tener más claro este punto, les invito a ver mi video La Trinidad de Dios.


Las naciones serán tributarias de adoración

El profeta Zacarías también nos da una referencia de la adoración que las naciones deberán ofrecer al Señor de señores y al Rey de reyes.

"Y todos los que sobrevivieren de las naciones que vinieron contra Jerusalén, subirán de año en año para adorar al Rey, a Jehová de los ejércitos, y a celebrar la fiesta de los tabernáculos. Y acontecerá que los de las familias de la tierra que no subieren a Jerusalén para adorar al Rey, Jehová de los ejércitos, no vendrá sobre ellos lluvia. Y si la familia de Egipto no subiere y no viniere, sobre ellos no habrá lluvia; vendrá la plaga con que Jehová herirá las naciones que no subieren a celebrar la fiesta de los tabernáculos. Esta será la pena del pecado de Egipto, y del pecado de todas las naciones que no subieren para celebrar la fiesta de los tabernáculos." Zacarías 14:16-19

Satanás es atado por mil años

"Vi a un ángel que descendía del cielo, con la llave del abismo, y una gran cadena en la mano. Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo y Satanás, y lo ató por mil años; y lo arrojó al abismo, y lo encerró, y puso su sello sobre él, para que no engañase más a las naciones, hasta que fuesen cumplidos mil años; y después de esto debe ser desatado por un poco de tiempo." Apocalipsis 20:1-3
En el texto de Apocalipsis, vemos seis cosas que este ángel hace con Satanás:
  1. Lo prende.
  2. Lo ata por mil años.
  3. Lo arroja al abismo.
  4. Usa una llave y una gran cadena para dejarlo encerrado.
  5. Pone un sello sobre él para que no siga engañando a las naciones.
  6. Después de los mil años lo suelta
Obviamente, tanto la llave como la cadena, son especiales; pues Satanás es un ser espiritual y para atarlo Dios tuvo que haber creado estos implementos especiales para retenerlo. Puede tratarse del poder especial de Dios sobre Satanás, recordemos que Dios nunca le ha dado total libertad, siempre ha estado bajo la autoridad de Dios.

También es importante resaltar los nombres con los que se conoce a Satanás: El dragón, la serpiente antigua, el diablo y Satanás. Resaltando así la naturaleza de este ser bestial y monstruoso.

¿Por qué es necesario atar a Satanás?

Hay dos respuestas a esta pregunta. Primero, porque Satanás desde un principio ha querido destruir la obra de Dios. Ha engañado a las naciones con soluciones de un gobierno, sin Dios. Ha utilizado las guerras, como medio para lograr que las naciones piensen que, esa es la solución para lograr sus propósitos.  Les ha hecho creer que, la educación, el medio ambiente, la religión falsa, los derechos humanos, la ideología de género, la integración social, etc. son medios para lograr un mundo mejor, sin necesidad de Cristo en sus vidas.

La segunda razón, es demostrarle al hombre, la maldad que tiene en su corazón. Muchas veces, el hombre se escuda en Satanás, para echar sobre él la culpa de la maldad del hombre. Pero esto no es así, hay tres aspectos que afectan al hombre, el mundo, la carne y Satanás. El pecado de la humanidad no es culpa solamente de Satanás, dos terceras partes son por sus propias concupiscencias. Los deleites del mundo y sus deseos carnales desenfrenados, son la mayor causa del pecado del hombre. Éstos nacen en su propio corazón y son consumados por sus concupiscencias. 

Dios va a demostrar, que a pesar de estar Satanás atado, el hombre es corrupto y en su pensamiento está de continuo el mal.
"Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?" Jeremías 17:9
"Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal." Génesis 6:5
Para establecer su reino, Jesús debe atar al señor y príncipe de este mundo, así lo dejó claro en los evangelios.
"Ninguno puede entrar en la casa de un hombre fuerte y saquear sus bienes, si antes no le ata, y entonces podrá saquear su casa." Marcos 3:27
Satanás se cree dueño de esta tierra, pero ya Jesucristo le quitó ese dominio en la cruz del Calvario. Ahora Jesús viene a reclamar lo que le pertenece.

Los santos reciben el reino con Cristo

"Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años." Apocalipsis 20:4

Juan nos dice que vio tronos, y sentados en ellos los que recibieron la facultad de juzgar. De acuerdo con otros pasajes bíblicos, los santos son los que juzgarán al mundo.

"y que el reino, y el dominio y la majestad de los reinos debajo de todo el cielo, sea dado al pueblo de los santos del Altísimo, cuyo reino es reino eterno, y todos los dominios le servirán y obedecerán." Daniel 7:27 

"¿O no sabéis que los santos han de juzgar al mundo? Y si el mundo ha de ser juzgado por vosotros, ¿sois indignos de juzgar cosas muy pequeñas?" 1 Corintios 6:2
"Y Jesús les dijo: De cierto os digo que en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de su gloria, vosotros que me habéis seguido también os sentaréis sobre doce tronos, para juzgar a las doce tribus de Israel." Mateo 19:28

El hecho de que los santos reciban el reino, fue profetizado por Daniel:

"hasta que vino el Anciano de días, y se dio el juicio a los santos del Altísimo; y llegó el tiempo, y los santos recibieron el reino." Daniel 7:22


 La primera resurrección

Al final del texto, Juan nos dice que vio las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años. Claramente, nos dice que ellos vivieron; y reinaron con Cristo mil años. Aquí, tengo que hacer una aclaración, pues en este capítulo, se nos da a entender de dos resurrecciones diferentes que tendrán lugar. Voy a referirme, cómo está formada esta primera resurrección, vamos a ver las fases que la conforman, donde sólo los creyentes tienen participación:


1.- Cristo las primicias. Cristo fue el primero en resucitar, con un cuerpo glorificado, el cual no volvería a morir.
"Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho. Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos. Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida. Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia. Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies." 1 Corintios 15:20-25
2.- Los santos de la Iglesia en el arrebatamiento. Los ya muertos resucitarán y los vivos seremos transformados, recibiendo un cuerpo glorificado, semejante al de Cristo. Esta segunda fase de la resurrección no incluye a los muertos del Antiguo Testamento, ellos tomarán parte de la tercera fase.
"Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor." 1 Tesalonicenses 4:16-17

3.- Los santos del Antiguo Testamento y los mártires de la Gran Tribulación. Después de la Gran Tribulación, cuando Cristo regrese a la tierra, tendrá lugar esta resurrección de los santos desde Adán, hasta Cristo. Y los mártires que fueron asesinados por el anticristo, resucitarán en esta fase y todos entrarán con Cristo en el reino milenial.

"En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo; y será tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces; pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se hallen escritos en el libro. Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua. Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad." Daniel 12:1-3

4.- Los creyentes del milenio. Los últimos en recibir cuerpos glorificados y eternos, serán los santos del milenio. Pues aparentemente, no habrá muerte para los creyentes durante el reinado de Cristo. 

Estas cuatro fases corresponden a la primera resurrección, mencionada en Apocalipsis 20:5-6
"Pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años. Esta es la primera resurrección. Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él mil años." Apocalipsis 20:5-6

De acuerdo con el texto anterior, los incrédulos resucitarán hasta después del milenio; y será para participar del juicio del Gran Trono Blanco, donde todas sus obras serán reveladas y recibirán la condenación eterna. Dios como juez justo, les da el debido proceso, para que vean que ellos mismos se condenaron, debido a sus obras de maldad y por haber rechazado el sacrificio de Cristo por sus pecados. Esta condenación es lo que Juan llama, la segunda muerte, la cual se aplica sólo a los incrédulos, los santos no pasarán por ella; ya que tendrán vida eterna.


Derrota final de Satanás

Antes de continuar con la derrota final de Satanás, la cual se dará después del milenio, hay tal vez una pregunta que usted se está haciendo; ¿Quiénes entrarán en el reino milenial de Cristo? Recordemos que durante la Gran Tribulación, muchas personas morirán a consecuencia de los juicios de Dios. Sin embargo, habrá aún muchas personas que sobrevivirán. Algunos serán creyentes en Jesucristo, y otros no; dentro de los creyentes habrá judíos y gentiles. Antes de iniciar su reino milenial, Jesucristo realiza un juicio sobre las naciones, donde separará las ovejas de los cabritos, según el relato de Mateo 25:31-46
"Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda. Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti? Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis. Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles. Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber; fui forastero, y no me recogisteis; estuve desnudo, y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis. Entonces también ellos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo, o en la cárcel, y no te servimos? Entonces les responderá diciendo: De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a mí lo hicisteis. E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna."

De acuerdo con este texto, al reino milenial de Cristo, solamente entrarán los creyentes en Él, tanto judíos como gentiles, salidos de la Gran Tribulación. Juntamente con ellos, estarán en el reino los resucitados y la Iglesia, según lo que vimos en la primera resurrección. Todos los que participen del reino serán creyentes en el Señor, unos ya con cuerpos glorificados, los cuales reinarán juntamente con Cristo, siendo parte de su gobierno mundial. Éstos con cuerpo glorificados, ya no se reproducirán, ni se casarán.  Los otros, creyentes justificados por la sangre de Cristo, tanto judíos como gentiles, vivirán una vida normal durante el milenio, se casarán y tendrán familia. En un mundo regenerado, sin la influencia maligna de Satanás. Éstos llenarán la tierra con nuevas generaciones, durante ese periodo de mil años. Sin embargo hay otra posición que dice que incrédulos también entrarán en el milenio y que ellos son los que contaminarán a esas nuevas generaciones. Mi opinión personal, va en contra de esta última posición, pues no cumple con lo relatado en Mateo.

Ahora sí, veamos la derrota final de Satanás. Juan nos describe en los versículos del siete al diez de este capítulo veinte lo siguiente:

"Cuando los mil años se cumplan, Satanás será suelto de su prisión, y saldrá a engañar a las naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra, a Gog y a Magog, a fin de reunirlos para la batalla; el número de los cuales es como la arena del mar. Y subieron sobre la anchura de la tierra, y rodearon el campamento de los santos y la ciudad amada; y de Dios descendió fuego del cielo, y los consumió. Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos."

Es demasiado triste para mí, leer lo que Juan escribe en este pequeño pasaje de cuatro versículos. Jesucristo inicia su reino milenial, con sólo personas que son creyentes en Él, que han sido redimidas con su sangre, y justificadas por el sacrificio de Cristo en la cruz del calvario, y que recibieron la gracia de Dios para alcanzar salvación. Pese a esto, las nuevas generaciones que se levantan durante el milenio, no tendrán ese mismo convencimiento y al final del milenio, cuando Satanás vuelva a ser soltado; engañará a las naciones. Es inconcebible para mí, que después de experimentar un gobierno teocrático, donde la influencia del maligno no está presente y donde reina la justicia y la paz de Jesucristo; el hombre caiga en las artimañas del enemigo y se deje engañar. Con esto Dios está demostrándole al hombre, que en su corazón sólo hay maldad y que la razón de su pecado, no es por las circunstancias que lo rodean. Pensar que la naturaleza humana es básicamente buena, es una gran mentira. Esto confirma lo que escribió el profeta Jeremías:

"Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?" Jeremías 17:9

Dice el relato bíblico que Satanás logra reunir un número de adeptos tales, que los compara con la arena del mar. Esto es doloroso, no fueron unos cuantos, sino millones de personas que fueron engañadas por este ser abominable. El fin de ellos es lamentable, Dios hizo descender fuego del cielo, y los consumió. Luego lanza al diablo al lago de fuego y azufre, para que les haga compañía a la bestia (el anticristo) y al falso profeta, para ser atormentados día y noche por los siglos de los siglos.


El juicio ante el gran trono blanco

Después de que Dios lanza al diablo al lago de fuego y azufre, Juan nos presenta otra escena en el cielo, veamos el texto bíblico:
"Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos." Apocalipsis 20:11

Juan nos relata que vio un gran trono blanco, la majestuosidad de este trono que llamó la atención de Juan, se debe más por el que estaba sentado en él, que por el trono en sí. Juan nos dice que delante del que estaba sentado, huyeron la tierra y el cielo, y que ningún lugar se encontró para ellos. Esto puede significar que tanto el cielo como la tierra serán destruidos, ya que Juan, en el capítulo 21, nos dice que habrá un cielo y una tierra nuevos. Para que algo sea hecho nuevo, debe ser destruido el anterior.

"Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras. Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras. Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego." Apocalipsis 20:12-15

Ante este trono solamente los incrédulos serán presentados, pues los justos ya fueron resucitados y están gozando de la presencia del Señor en el cielo. La expresión de Juan de ver a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; se refiere a los muertos espirituales, los que no aceptaron a Cristo como su Señor y Salvador. Por lo tanto, serán juzgados con base en sus obras y con base en la ley de Dios.  Grandes y pequeños hace referencia a que no habrá distinción entre clases sociales o posiciones políticas. Dice el relato que fueron juzgados los muertos, por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras. La Biblia dice que incluso por cada palabra que se haya hablado, se dará cuenta a Dios en este juicio. La base del juicio está en los libros que serán abiertos, donde todos los hechos de los hombres han sido registrados, cada pensamiento, cada palabra y cada obra. Después de verificar todos los hechos de los hombres y mujeres, se abrirá el otro libro, el de la vida; donde consta el nombre de cada persona que entregó su vida a Cristo, reconociendo su pecado y arrepintiéndose de los mismos y aceptando el sacrificio expiatorio de Cristo, para obtener la justificación ante el Padre y ser merecedor de su Gracia. Obviamente, ninguno de los que pasan por este juicio van a estar registrados en este libro, pero probablemente sí esté registrado el día y la hora en que rechazaron al Salvador. El Apóstol Pablo se refirió a este momento, en su carta a los romanos:

"en el día en que Dios juzgará por Jesucristo los secretos de los hombres, conforme a mi evangelio." Romanos 2:16

Ahora bien, el que rechaza el sacrificio expiatorio de Cristo, está declarando que por sus obras podrá alcanzar salvación, pero Dios juzgará sus obras a la luz de su ley. De esta manera, su juicio es justo, pues demostrará que nadie es justo por las obras de la ley, pues nadie pudo cumplir con ella, salvo Jesucristo.

Para poder comparecer ante el trono de Dios, los muertos son resucitados, esta es la segunda resurrección y la muerte sí tiene sobre ellos potestad, pues serán condenados a la muerte eterna, lo que implica la separación eterna de la presencia de Dios. Nadie escapa de esta comparecencia, pues dice el relato de Juan que: el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos.

Por lo tanto, se cumple lo escrito por el Apóstol Pablo en cuanto a que la muerte será el postrer enemigo que será destruido. Pues la muerte ya cumplió su propósito y dejará de ser:

"Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte." 1 Corintios 15:26

Por este motivo, Juan nos dice que: la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego.

Todos los que pasen por este juicio, tendrán como destino el lago de fuego y azufre, preparado para el diablo y sus ángeles


Conclusión

El tema de este capítulo inicia con el reinado del Mesías, tan esperado por los judíos, sin embargo, dentro del capítulo se mencionan dos juicios, contra Satanás y contra los incrédulos de todas las épocas. La sentencia del juez justo será basada en todo lo escrito en los libros de las acciones, y obras de cada uno. Al final del capítulo encontramos a Satanás haciéndole compañía a la bestia, y al falso profeta en el lago de fuego y azufre; y a todos los incrédulos siendo sentenciados a pasar la eternidad juntamente con ellos.

Para algunos que apelan al amor de Dios, no encuentran sentido en que todas estas personas sean lanzadas, junto con el diablo y sus ángeles, en este lago de fuego. Sin embargo, la justicia de Dios no puede ser pasada por alto. Sería injusto para todos los que se justificaron en la sangre de Cristo y vivieron una vida agradándole a Él, o depositando su confianza en Él. Dios como juez de todo el universo, tiene que hacer justicia por ser un Dios Justo y Santo.

Próximamente, en el capítulo 21 estaremos estudiando sobre "el cielo nuevo y la tierra nueva" y "la nueva Jerusalén", les invito a continuar estudiando el Apocalipsis, ya solo nos restan dos capítulos más, para dar por finalizado este estudio. Les agradezco su fidelidad al mismo y les invito a no perderse la siguiente publicación. ¡Dios les bendiga!