Los 144.000 sellados - Apocalipsis 7
por José Daniel Quesada
Introducción
El capítulo siete de Apocalipsis, nos abre un paréntesis dentro del sexto sello del capítulo seis. En este paréntesis se nos habla de 144.000 siervos de Dios, que serán sellados en sus frentes. El sello es un símbolo de propiedad, de posesión. Por lo tanto estos siervos de Dios, que serán sellados durante el período de la Gran Tribulación, son posesión de Dios. Algunos estudiosos han tratado de equiparlos con la iglesia, sin embargo estos esfuerzos son inútiles, a la luz de su reaparición en medio de los 24 ancianos en el capítulo 14. Otros tratan de darle un significado simbólico, sin embargo, el texto se debe tomar literalmente, tal como se lee. Otros grupos religiosos, se identifican con este grupo, pero lo toman como un número simbólico que los representa a todos ellos. Como ya lo comenté antes, el texto se debe tomar de forma literal y no simbólica. Finalmente, este grupo de 144.000 sellados, son judíos, no gentiles, por lo tanto, no se trata ni de la iglesia, ni de otro tipo de agrupación religiosa.
Los sellados
Analicemos el texto bíblico de Apocalipsis:
"Después de esto vi a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro ángulos de la tierra, que detenían los cuatro vientos de la tierra, para que no soplase viento alguno sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol. Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol, y tenía el sello del Dios vivo; y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de hacer daño a la tierra y al mar, diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios.Y oí el número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de Israel.De la tribu de Judá, doce mil sellados. De la tribu de Rubén, doce mil sellados. De la tribu de Gad, doce mil sellados. De la tribu de Aser, doce mil sellados. De la tribu de Neftalí, doce mil sellados. De la tribu de Manasés, doce mil sellados. De la tribu de Simeón, doce mil sellados. De la tribu de Leví, doce mil sellados. De la tribu de Isacar, doce mil sellados. De la tribu de Zabulón, doce mil sellados. De la tribu de José, doce mil sellados. De la tribu de Benjamín, doce mil sellados." Apocalipsis 7:1-8
Los cuatro ángulos de la tierra
El Apóstol Juan nos narra que, después de que se abre el sexto sello y se desvela su contenido, él ve a cuatro ángeles de pie sobre los cuatro puntos cardinales de la tierra. En la primera publicación que hice sobre Apocalipsis, mencioné el significado bíblico de algunos de los números (si desea volver a verlo puede dar clic aquí). En esa oportunidad, mencioné que el número cuatro representa al mundo, sus cuatro estaciones y sus cuatro puntos cardinales. Debo ahora ampliar, que el número cuatro es símbolo de la creación material, el planeta tierra y todo el universo creado por Dios. En el libro de Génesis, leemos que en el cuarto día, Dios creó las lumbreras, el Sol, la Luna y las estrellas, en otras palabras, el universo.
Los cuatro vientos de la tierra
Continuando con el texto bíblico, leemos que los cuatro ángeles, están deteniendo los cuatro vientos de la tierra. ¿Qué significado tienen estos cuatro vientos? Si continuamos con la lectura, podemos leer en el versículo dos, que a éstos ángeles, se les había dado el poder de hacer daño a la tierra y al mar. Por lo tanto, los cuatro vientos significan, los juicios que vendrán con las siete trompetas del séptimo sello.
El ángel con el sello del Dios vivo
El versículo dos, también nos narra, que Juan vio un ángel que subía del este con el sello del Dios vivo. Este otro ángel, clama a gran voz y les dice a los cuatro ángeles que sostienen los cuatro vientos, que no dañen la tierra, ni el mar, ni los árboles; en otras palabras, que aún no ejecuten los juicios, hasta que se sellen a los siervos de Dios, en sus frentes.
Los 144.000 sellados
Recordemos que estamos dentro de la semana setenta del profeta Daniel. Que estos juicios decretados por Dios, atañen al pueblo de Israel, al igual que las anteriores sesenta y nueve semanas de juicio que vinieron sobre Israel. Por lo tanto, los sellados son parte del remanente israelí, escogido por Dios. Solamente Dios puede hacer esta selección, ya que diez de las doce tribus de Israel, se dispersaron después del exilio. Así que, Dios va a sellar a doce mil individuos de cada tribu.
Solamente como un dato informativo, voy a aclarar que las doce tribus, tuvieron su origen en los doce hijos de Jacob:
- Rubén.
- Simeón.
- Leví.
- Judá.
- Dan.
- Neftalí.
- Gad.
- Aser.
- Isacar.
- Zabulón.
- José.
- Benjamín.
Sin embargo, cuando el pueblo de Israel es establecido en la tierra de Canaán, las doce tribus se establecen de forma diferente:
- Tribu de Rubén.
- Tribu de Simeón.
- Tribu de Judá.
- Tribu de Dan.
- Tribu de Neftalí.
- Tribu de Gad.
- Tribu de Aser.
- Tribu de Isacar
- Tribu de Zabulón.
- Tribu de Efraín.
- Tribu de Manasés.
- Tribu de Benjamín.
Si observamos, el hijo de Jacob, Leví, no tiene una tribu. Esto se debe a que dicha tribu fue elegida por Dios, para ejercer el sacerdocio. El otro hijo de Jacob que no tiene tribu, es José. Esto se debe a que Jacob tomó a los primeros dos hijos de José, nacidos en Egipto, como parte de sus hijos. Por lo tanto, Efraín y Manasés, se contaron como parte de las doce tribus de Israel (Israel es el mismo Jacob, Dios le cambió el nombre).
En Apocalipsis 7, las tribus mencionadas, son diferentes a lo indicado anteriormente y su orden también cambia, veamos la lista de los sellados por tribu:
- De la tribu de Judá, 12.000
- De la tribu de Rubén, 12.000
- De la tribu de Gad, 12.000
- De la tribu de Aser, 12.000
- De la tribu de Neftalí, 12.000
- De la tribu de Manasés, 12.000
- De la tribu de Simeón, 12.000
- De la tribu de Leví, 12.000
- De la tribu de Isacar, 12.000
- De la tribu de Zabulón, 12.000
- De la tribu de José, 12.000
- De la tribu de Benjamín, 12.000
La lista anterior, es encabezada por la tribu de Judá, tribu de la cual salió el Mesías y que dió origen al gentilicio "judíos". Se incluye la tribu de Leví, indudablemente debido a la cesación del sacerdocio del Antiguo Testamento. Se excluye a la tribu de Dan, posiblemente por haber sido una tribu históricamente idolátrica. Se incluye la tribu de José y no se incluye la tribu de su hijo Efraín. Dentro de la tradición israelí, el primogénito heredaba el doble; sin embargo, debido al pecado de Rubén, quien se acostó con Bilha, concubina de su padre, perdió este derecho. Por este motivo, Judá encabeza la lista de estas tribus.
Dios tiene un propósito maravilloso para Israel en los últimos días. Los 144.000 judíos (israelitas) serán maravillosamente convertidos a Cristo durante la tribulación, después del éxodo de la iglesia. La lista suministrada por Juan agrega validez a la interpretación de que éstos son judíos. Su labor será la de predicar el evangelio de Jesucristo para que judíos y gentiles reciban la salvación.
En la actualidad el creyente a sido sellado con el Espíritu Santo, quién es la garantía de nuestra herencia hasta la redención.
"En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria." Efesios 1:13-14
Con el arrebatamiento de la iglesia, el Espíritu Santo termina su labor en la tierra, regresa al cielo y debido a esto, es que los ciento cuarenta y cuatro mil, son sellados con el nombre del Cordero y el de su Padre, en las frentes.
La multitud vestida de ropas blancas
Después de mirar a los 144.000 sellados, Juan observa una gran multitud de todas las naciones, razas, pueblos y lenguas. Veamos el texto bíblico:
"Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos; y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero. Y todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres vivientes; y se postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron a Dios, diciendo: Amén. La bendición y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén." Apocalipsis 7:9-12
La expresión de Juan, de que la multitud que vio, nadie la podía contar, nos da la idea de millones de personas. Juan también nos indica que aquella multitud, estaba formada por personas de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas. En otras palabras, son gentes que vienen de toda la tierra. Juan vio esta multitud delante del trono y en la presencia del Cordero y vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos. Nótese que esta visión de Juan, se da hasta después de los primeros seis sellos. Por lo tanto, son personas redimidas durante esta primera parte de la tribulación. Toda esta multitud se une a los veinticuatro ancianos y a los ángeles en la alabanza y adoración a Dios.
¿Quiénes son estos vestidos de ropas blancas?
La multitud que Juan observó vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son? le preguntó uno de los ancianos. Veámos el texto bíblico:
"Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome: Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son, y de dónde han venido? Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero. Por esto están delante del trono de Dios, y le sirven día y noche en su templo; y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos. Ya no tendrán hambre ni sed, y el sol no caerá más sobre ellos, ni calor alguno; porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará, y los guiará a fuentes de aguas de vida; y Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos." Apocalipsis 7:13-17
A pesar de que el período de la Gran Tribulación, se trata de juicios de Dios para su pueblo Israel, también afectará a los gentiles. Pero así como los gentiles sufrirán de los juicios de Dios en la Gran Tribulación, también podrán tener el beneficio de la salvación. Muchas personas serán redimidas durante este tiempo, de ahí que Juan vio una muchedumbre que nadie podría contar. Los gentiles también se encuentran entre los convertidos durante este período de aflicción. Al ser cuestionado Juan por uno de los ancianos, sobre la identidad de los vestidos de ropas blancas y su procedencia; Juan no dice que sean la iglesia, sino que su respuesta es: Señor, tú lo sabes. La respuesta del anciano es que todos ellos salieron de la Gran Tribulación, y que lavaron sus ropas en la sangre del Cordero. La expresión de que el que está sentado en el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos, implica que no son judíos, sino gentiles, y que la misericordia de Dios los ha incluído en la salvación. Finalmente se les hace partícipes de las bendiciones: Ya no tendrán hambre ni sed, y el sol no caerá más sobre ellos, ni calor alguno; porque el Cordero los pastoreará, y los guiará a fuentes de aguas de vida; y Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos.
Conclusión
Con esto terminamos el estudio del capítulo siete de Apocalipsis. Hemos visto las dos secciones en las que se divide el capítulo. Primero analizamos los 144.000 sellados y quiénes son, y cuál será su propósito. La segunda sección del capítulo, nos habla del fruto de esos 144.000 sellados. Una gran multitud se convertirá al evangelio y alcanzarán la salvación por misericordia de Dios.
Próximamente estaré iniciando con el estudio del capítulo ocho, y en él, la apertura del séptimo sello, e inicio de las siete trompetas. Hasta entonces, bendiciones!!
